En muchas ocasiones cuando sale una noticia de sobre acciones para facilitar la conciliación de la vida familiar y laboral nos ponen como referentes grandes empresas por lo que el mensaje no cala entre el pequeño empresariado, pero si quieres conciliar se puede conciliar.
La tendencia de un empresario de una pequeña empresa es a compararse con esas empresas y achacar a sus menores recursos la ausencia de acciones que permitan la conciliación real de sus empleados.
Por lo tanto, consideramos importante que las pequeñas y medianas empresas, como la nuestra, en la cual se está apostando por introducir medidas de este tipo, se den a conocer. Sólo de esta forma facilitaremos que otras empresas puedan verse en espejos reales, conociendo casos similares a los suyos y empiecen a planificar un cambio en su forma de trabajar.
Además, las medidas de conciliación de la vida familiar y laboral no sólo son aconsejables por el bienestar de los trabajadores, sino que además las empresas ganan en rentabilidad, reducen el absentismo y mejoran la implicación de sus trabajadores. Números estudios muestran que en España, como media, trabajamos en torno a 230 horas más que nuestros vecinos europeos, no obstante la productividad es menor que ya mayoría de estos países; por lo tanto, ha llegado la hora cambiar esto.
Por otro lado, menos horas en la oficina suponen importantes ahorros energéticos para la empresa lo que al final repercute positivamente en la cuenta de resultados de la misma.
Pero lo cierto es que no todo es un camino de rosa, tenemos que diseñar y fijar acciones adaptadas a nuestra empresa, que nos permitan su implementación sin afectar gravemente a su funcionamiento, por lo que se han de estudiar en profundidad para cada uno de los casos.
Nosotros os presentamos algunas acciones que hemos considerado adecuadas para nuestra empresa:
Flexibilidad horaria. Dentro de unos márgenes previamente fijados, se permite a los trabajadores diseñar y proponer sus propios horarios, adaptados a la vida personal lo que supone una mejora en la calidad de vida y en la conciliación familiar importante.
Uso de Internet libre. Mediante esta medida se consiguen diferentes aspectos que suponen una mejora de la productividad laboral, como son la reducción de la sensación de desconfianza, facilitación de acceso a contenidos formativos, adaptación ágil de la empresa y su equipo a los cambios tecnológicos. Es cierto, que existe parte del tiempo que se puede usar para actividades personales pero también es cierto que limitar estos accesos conlleva un tiempo y un coste de software que muy posiblemente no se vea compensado.
Teletrabajo. Esta medida es recomendable en determinadas situaciones y facilita mucho la conciliación, no obstante, se ha de implantar de forma gradual y adaptada a cada empresa. En nuestro caso, la solemos utilizar en periodos vacacionales, consiguiendo la reducción de gastos, incrementar la productividad y la motivación.
Más vale un gramo de hacer que un kilo de decir…así que poneros a diseñar vuestro plan de conciliación, ¡¡¡no os arrepentiréis!!!
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